Finisterre(en gallego, Fisterra) es un cabo situado en la costa atlánticaespañola, en el municipio gallego de Finisterre (La Coruña). Fue declarado en el año 2007 como Patrimonio europeo.
Los romanos pensaban que éste era el punto más occidental del mundo conocido.
El faro fue construido en 1853. La torre del faro, de piedra, es la base octogonal, y termina en una repisa de la chimenea sobre la cual descansa el balcón. Arriba está la cúpula con una linterna poligonal. La torre mide 17 metros y su luz, situado a 143 metros sobre el nivel del mar, llega a más de 30 millas náuticas.
Fue el escenario por excelencia de naufragios, como el de 1870 cuando un barco con 482 personas se hundió, fue el evento más triste de esta costa.
Hay también cerca de la sede de una serie de piedras vinculadas a leyendas religiosas: las piedras del Santo, las piedras están manchadas de vino, la Cátedra de Pedro, la tumba de Orcabella, etcétera.
Actualmente se conoce como Donde acaba la tierra en latin:(finis)= final,(terre)= tierra.
El 18 de enero de 1509, la flota portuguesa al mando de Duarte Pacheco Pereirahundió un barco y apresó los tres restantes del corsario francésPierre de Mondragón, quien murió en la lucha -fr:Bataille du cap Finisterre (1509)-
La primera batalla del Cabo Finisterre tuvo lugar el 14 de mayo de 1747, durante la Guerra de Sucesión austriaca. Fue una victoria para la flota británica al mando del almirante George Anson.
La segunda batalla del Cabo Finisterre tuvo lugar el 25 de octubre de 1747, y fue también una victoria decisiva para la flota británica al mando del almirante Sir Edward Hawke.
La tercera batalla del Cabo Finisterre tuvo lugar el 22 de julio de 1805, durante la tercera guerra de la coalición de las guerras napoleónicas. Una reunión no fue concluyente entre una flota británica al mando del vicealmirante Robert Calder y una flota hispano francesa dirigida por el almirante Pierre Charles Silvestre de Villeneuve.
Cabo Finisterre es actualmente el mejor destino para muchos peregrinos del Camino de Santiago, está a una distancia de 90 km de Santiago de Compostela (La Coruña), los peregrinos siguen hasta Muxía (a Coruña), un día de marcha más.
La catedral de Santiago de Compostela es un templo de culto católico situado en la ciudad homónima, en el centro de la provincia de La Coruña, en Galicia (España). Acoge el que, según la tradición, es el sepulcro del Apóstol Santiago, lo cual convirtió al templo en uno de los principales destinos de peregrinación de Europa durante la Edad Media a través del llamado Camino de Santiago, una ruta iniciática en la que se seguía la estela de la Vía Láctea comunicando la península ibérica con el resto del continente.
En la actualidad sigue siendo un importante destino de peregrinación. Un privilegio concedido en 1122 por el papa Calixto II declaró que serían «Año Santo» o «Año Jubilar» en Compostela todos los años en que el día 25 de julio, día de Santiago, coincidieran en domingo; este privilegio fue confirmado por el papa Alejandro III en su bula Regis aeterni en 1179.
Fue declarada Bien de Interés Cultural en 1896, y la ciudad vieja de Santiago de Compostela, que se concentra en torno a la catedral, fue declarada bien cultural Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985.
Historia
Según la tradición, el ApóstolSantiago el Mayor difundió el cristianismo en la península ibérica. En el año 44 fue decapitado en Jerusalén y sus restos fueron trasladados posteriormente a Galicia en una barca de piedra. A raíz de las persecuciones romanas de los cristianos de Hispania, su tumba fue abandonada en el siglo III. Siempre según la leyenda, esta tumba fue descubierta en torno al año 814 por el ermitaño Pelayo (Pelagius) después de ver unas luces extrañas en el cielo nocturno.
El obispo Teodomiro de Iria reconoció este hecho como un milagro e informó al rey Alfonso II de Asturias; el rey ordenó la construcción de una capilla en el lugar. Dice la leyenda que el rey se convirtió en el primer peregrino en este santuario. Esta capilla fue seguida por una primera iglesia el año 829 y posteriormente por una iglesia prerrománica el 899, construida por orden del rey Alfonso III, convirtiéndose gradualmente en un importante lugar de peregrinaje. El año 997 esta iglesia primitiva fue reducida a cenizas por Almanzor, comandante del ejército del califa de Córdoba. Las puertas y las campanas de la iglesia, portadas a hombros por cautivos cristianos hasta Córdoba, se añadieron a la mezquita aljama. Cuando Córdoba fue tomada por el rey Fernando III de Castilla en 1236, estas mismas puertas y campanas fueron transportadas por prisioneros musulmanes a Toledo, y se incluyeron en la Catedral de Santa María de Toledo.
La construcción de la actual catedral se inició en 1075 bajo el reinado de Alfonso VI y el patrocinio del obispo Diego Peláez. Fue construida según el mismo plano que la iglesia de ladrillo monástica de San Sernín de Toulouse, probablemente el mayor edificio románico de Francia. El templo fue construido fundamentalmente en granito. La construcción se detuvo en distintas ocasiones y, según el Liber Sancti Iacobi, la última piedra fue colocada en 1122 y la catedral fue consagrada en 1128. Según el Codex Calixtinus, los arquitectos fueron «Bernardo el viejo, un maestro maravilloso», su ayudante Galperinus Robertus y, más tarde, posiblemente «Esteban, maestro de catedrales». En la última etapa «Bernardo, el joven» (que posiblemente era hijo de Esteban) terminaba el edificio, mientras que Galperinus estuvo a cargo de la coordinación. También construyó una fuente monumental delante de la portada septentrional en 1122.
Descubrimiento del sepulcro
Los orígenes del culto a Santiago en Gallaecia se pierden en los anales de los tiempos. A finales del siglo VII se difunde al noroeste de la península ibérica la leyenda de que Santiago el Mayor había sido enterrado en esas tierras, después de evangelizarlas. Esta idea es recogida en la península por el tratado De Ortu et Obitu Patrum, de Isidoro de Sevilla, y en Inglaterra por el obispo Aldhelmo de Malmesbury.
El año 813, ocho siglos después de la muerte del Apóstol Santiago, un ermitaño llamado Pelayo (o Paio o Pelagio), junto con otros fieles, vio unas luces en las proximidades de un lugar conocido por el nombre de Solovio y lo comunicó a Teodomiro, obispo de Iria Flavia, (actualmente Padrón). Después de tres días de ayuno, el obispo y sus acompañantes fueron al lugar y descubrieron entre los matorrales un monumento hecho de losas de mármol, y no tuvieron ninguna duda de que se tratara del sepulcro del Apóstol y de sus dos discípulos, Atanasio y Teodoro. El obispo comunicó el hallazgo al rey de Asturias Alfonso II el Casto, que viajó con su corte al lugar y otorgó las tierras cercanas al sepulcro al obispo, más sus correspondientes rentas, y mandó construir una pequeña iglesia supra corpus apostoli «encima del cuerpo del Apóstol», junto a un baptisterio y otra iglesia dedicada al Salvador. Tiempo después, en un documento fechado el 4 de septiembre del 834, el rey decía:
Pues en nuestros días nos ha sido revelado el preciado tesoro del bienaventurado Apóstol, es decir su santísimo cuerpo. Al tener noticia de lo cual, con gran devoción y espíritu de súplica, me apresuré a ir a adorar y veneré tan precioso tesoro, acompañado de mi corte, y le rendimos culto en medio de lágrimas y oraciones como Patrón y Señor de España, y por nuestra propia voluntad, le otorgamos el pequeño obsequio antes referido, y mandamos construir una iglesia en su honor.
Aproximadamente desde el 813, con el hallazgo de las reliquias del Apóstol y bajo la protección del rey Alfonso II de Asturias, la noticia se extiende con rapidez por toda la Europa cristiana y los peregrinos empiezan a llegar al lugar, el denominado Campus Stellae (que degenerará en el término Compostela), y que se convirtió progresivamente en un centro de peregrinación con la fundación de un convento y diversos hospedajes en la propia ciudad. El año 850, Gotescalco, obispo francés de Le Puy-en-Velay peregrinó hasta el sepulcro y está considerado como el primer peregrino extranjero documentado.
HISTORIA DEL APÓSTOL SANTIAGO Y COMIENZO DEL CAMINO DE SANTIAGO
APÓSTOL SANTIAGO
En el Noroeste de España, en la céltica y verde Galicia, a la que los romanos llamaron "Finis Terrae", por ser el extremo más occidental del mundo hasta entonces conocido, cuenta la tradición que estuvo el Apóstol Santiago, como llaman los españoles a Jacob el hijo de Zebedeo y hermano de Juan el Evangelista.
Cuentan las confusas narraciones de los primeros años de la cristiandad que a él le fueron adjudicadas las tierras españolas para predicar el Evangelio, y que en esta tarea llegó hasta la desembocadura del río Ulla. Sin embargo con poco éxito y escaso número de discípulos, por lo que decidió volver a Jerusalén.
Imagen de Santiago Apóstol en la Catedral
Cuando regresó a Palestina, en el año 44, fue torturado y decapitado por Herodes Agripa, y se prohibió que fuese enterrado. Sin embargo sus discípulos, en secreto, durante la noche trasladaron su cuerpo hasta la orilla del mar, donde encontraron una barca preparada para navegar pero sin tripulación. Allí depositaron en un sepulcro de mármol el cuerpo del apóstol que llegaría tras la travesía marítima, remontando el río Ulla hasta el puerto romano, en la costa Gallega, de Iria Flavia, la capital de la Galicia romana. Allí enterraron su cuerpo en un compostum o cementerio en el cercano bosque de Liberum Donum, donde levantaron un altar sobre el arca de mármol.
Tras las persecuciones y prohibiciones de visitar el lugar, se olvidó la existencia del mismo, hasta que en el año 813 el eremita Pelayo observó resplandores y oyó cánticos en el lugar. En base a este suceso se llamaría al lugar Campus Stellae, o Campo de la Estrella, de donde derivaría al actual nombre de Compostela.
El eremita advirtió al obispo de Iria Flavia, Teodomiro, quien después de apartar la maleza descubrió los restos del apóstol identificados por la inscripción en la lápida. Informado el Rey Alfonso II del hallazgo, acudió al lugar y proclamó al apóstol Santiago patrono del reino, edificando allí un santuario que más tarde llegaría a ser la Catedral. A partir de esta declaración oficial los milagros y apariciones se repetirían en el lugar, dando lugar a numerosas historias y leyendas destinadas a infundir valor a los guerreros que luchaban contra los avances del islam y a los peregrinos que poco a poco iban trazando el Camino de Santiago.
Según leyendas locales, el apóstol Santiago había estado predicando el evangelio en Hispania sin aparente éxito y, desmoralizado, creyó rendirse. En ese momento, mientras rezaba en el punto donde hoy se levanta el templo, una barca de piedra apareció en el mar y en ella se encontraba María que lo consoló, animó y dio por terminada su misión en ese lugar, pidiéndole que volviera a Jerusalén. Posteriormente dejó en el lugar los restos de la embarcación, que son rocas con formas peculiares que se encuentran frente al templo.
La primera evidencia clara de construcciones en la zona es la de una ermita del siglo XII y posteriormente ya evidencia escrita en el año 1544.A partir del siglo XVII, y motivado por los milagros atribuidos a la virgen, se fueron construyendo edificios de cada vez mayor tamaño hasta que entre los años 1716 y 1719 se construyó el edificio actual con el patrocinio de los entonces duques de Maceda, cuyos restos fueron posteriormente depositados en el templo.
Posteriormente, durante el siglo XIX, se añadieron al edificio dos construcciones laterales, la casa rectoral (1828) y una espadaña (1834) que aún hoy se conservan.
Ya durante el siglo XX un emigrante gallego en América, financió las obras que remataron la fachada con dos torres. El 25 de diciembre de 2013, durante la ciclogénesis explosiva Dirk, un rayo provocó un incendio que arrasó el techo y el interior de la iglesia con grandes pérdidas materiales aunque no personales. Tras esto, durante meses la estructura soportó vientos huracanados y lluvia incesante hasta que en junio de 2014 comenzaron los trabajos de limpieza y restauración que el arzobispado de Santiago de Compostela asumió en su totalidad.En 2017 se colocó, en sustitución del retablo mayor, una lámina de vinilo con una fotografía del mismo.
A consecuencia del hundimiento del Prestige gran parte del patrimonio fue dañado o destruido.
Texto by Wikipedia
La "Pedra dos Cadrís", que según la leyenda cristiana simbolizaría la vela de la embarcación en la que apareció la Virgen, tiene forma de riñón o hueso ilíaco, según se mire, y a ella se le atribuyen propiedades curativas para dolores de riñones, reuma, etc. Para que estas enfermedades curen es preciso pasar nueve veces por debajo de ella.
"Pedra dos Cadrís"
Según la leyenda la Madre de Dios arribó a "Costa da Morte" en los primeros años del cristianismo y que los restos de su embarcación se encuentran esparcidos por esta zona.
Se cuenta que la famosa piedra de Abalar era el timón de la barca sobre la que llegó la Virgen.
Se dice que esta piedra no se mueve a voluntad, sino que,
bambolea en determinados momentos, siendo creencia general que sólo se agita cuando los que están sobre ella se encuentran libres de pecado mortal, oyéndose el ruido provocado en, por lo menos, un kilómetro a la redonda.
La Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago (FEAACS) hace un llamamiento a la prudencia y a la coordinación. Para garantizar un regreso seguro al Camino. Tras el anuncio del Gobierno de la apertura del territorio español al tránsito internacional de personas, a partir del 1 de julio.
La Federación recuerda que toda vez que la pandemia del Covid-19 no ha finalizado y que tan pronto la movilidad vaya recuperando su estado de libertad plena. cabe esperar que los peregrinos regresen progresivamente al Camino. Peregrinos no solo españoles, sino procedentes de cualquier lugar del mundo. Alentados por el efecto llamada y la vuelta a la denominada nueva normalidad.
Una realidad que preocupa a la Federación Española de Asociaciones de Amigos del Camino de Santiago. A quien la apertura de fronteras para primeros de julio:
«Ha cogido por sorpresa. Siempre consideramos una hoja de ruta en la que hubiera una primera fase, exclusivamente con peregrinos nacionales, lo que permitiría verificar y consolidar las medidas a aplicar. Esta decisión es una invitación ampliada, un efecto llamada que repercutirá en un aumento del número de peregrinos», subraya la Federación Española. La cual recuerda que «a día de hoy no existen normas que garanticen la seguridad de las personas, tan solo recomendaciones dirigidas a reducir riesgos, y cuya implementación requiere medidas, material y personal».
Albergues y seguridad en el Camino de Santiago
Las recomendaciones enfocadas a “Albergues y Hostels” lo hacen pensando en establecimientos turísticos. Unas recomendaciones que, a juicio de la Federación, no contemplan la realidad de los albergues tradicionales. «Creemos que peregrino y turista no son lo mismo, es conveniente no confundirlos».
Los albergues, lugar tradicional de acogida de la Rutas Jacobeas, son una de las piedras angulares del Camino y fundamentales en su reactivación.
«El alojamiento de los albergues se verá reducido prácticamente a un tercio de su capacidad habitual, y así debe ser. Sin embargo, el binomio peregrinos-camas, si no está sincronizado, puede ocasionar problemas en algunas poblaciones».
«Si algo sucede, un protocolo de actuación debe estar completamente definido». Y añade: «no sólo debemos ofrecer albergues seguros. Es preciso concienciar al peregrino de que su responsabilidad individual es fundamental en este momento».
A finales del siglo XVI la flota de la reina Isabel quería tomar el control de las vías fluviales desde Inglaterra hasta Portugal.El grupo de galeones encabezados por Sir Francis Drake era el terror de los puertos del oeste de España.El 4 de mayo de 1589, las fuerzas inglesas parecían tomar el control de la ciudad de La Coruña, y los ciudadanos necesitaban esperanza. No la encontraron en los soldados, pero sí en una mujer cuyas valientes acciones salvaron la ciudad.
La Heroica
A principios de mayo de 1589 los británicos atacaron una de las ciudades más antiguas de España – La Coruña-.En medio de la batalla, Pita salió de su casa para proteger la ciudad en compañía de su marido. Lamentablemente, su marido fue alcanzado por una ballesta y murió inmediatamente.
En ese momento ella podría haber tomado la decisión de regresar a casa, pero las fuentes dicen que Pita, impulsada por el dolor, se unió a los hombres que luchaban contra los invasores. Consiguió abatir a un soldado Inglés que trataba de llegar a la parte más alta de la ciudad.Entonces, María se puso de pie en la parte superior de las murallas y gritó: “QUIÉN TENGA HONRA, QUE ME SIGA”…
Gracias a su inspirada y valiente acción, las personas que estaban luchando para salvar La Coruña encontraron nuevas fuerzas para defender la ciudad con mayor ímpetu de lo esperado.La gesta de María Pita fue recompensada por el rey Felipe II, quien la concedió una pensión a la altura de un oficial del ejército.Por sus acciones se le reconoció como una de las mujeres más honorables de España.
Una Heroína Olvidada
Durante los 200 años posteriores a su muerte, nadie escribió su biografía, María Pita parecía haber sido olvidada por su país e incluso por su ciudad.Por desgracia, durante estos años gran parte de la información acerca de esta mujer increíblemente valiente “parece” que se perdió.
El primer libro sobre su vida y valentía apareció a finales del siglo XIX. El texto explica que María Pita nació en Cambre, un pueblo cerca de La Coruña, en 1565. Su verdadero nombre era Fernández de Cámara y Pita, pero por razones desconocidas se la conoció como María.Hay algunas teorías relacionadas con su nombre;pero la explicación más probable es que ella es recordada por el nombre de su hermana.
María se casó cuatro veces y tuvo cuatro hijos.El marido cuya muerte le inspiró a defender su ciudad fue el segundo.El número de matrimonios y la falta de recursos históricos de ella también ha causado muchos problemas para los investigadores modernos que han intentado completar su biografía.
¿Dónde está la tumba de María Pita?
María Pita murió en 1643 en el mismo pequeño pueblo donde nació.Después de muchos años de vivir en la gloria en La Coruña, se hizo mayor y decidió volver a la casa de su familia natal.Falleció en Cambre y fue enterrada junto a uno de sus maridos, pero el tiempo transcurrido ha hecho olvidar donde se encuentra su tumba.
Se barajan varias ubicaciones posibles como: la iglesia de Santa María en Cambre, iglesia de Santo Domingo en La Coruña, e incluso investigaciones más recientes sitúan sus restos en la iglesia situada en Oza (otro pequeño pueblo situado en la misma zona)
Hoy en día, en la parte central de la ciudad hay una plaza llamada Plaza María Pita.En este lugar los gallegos honran a la mujer que cambió la historia de su región con un monumento que representa a Pita durante el ataque enemigo.A sus pies hay una placa con la palabra “Libertad” – quizás la palabra que más importante y que mejor puede definir la vida de esta gran heroína…
Malpica aparece citada documentalmente en el siglo XIII, como lugar perteneciente al señorío del arzobispo de Santiago de Compostela. En el siglo XV Sancho de Ulloa, conde de Monterrey, la incorporó a sus dominios. A principios del siglo XVII la actividad económica fundamental era la pesca de ballenas, en colaboración con marineros cántabros y vascos. Decaída la pesca de la ballena, fue hasta la actualidad puerto de pesca de bajura, durante mucho tiempo para las fábricas de conserva y salazón, hoy desaparecidas de esta comarca.
Debido a su importancia como puerto ballenero, Malpica fue sede de la Ayudantía de Marina hasta el año 1895, fecha en la que se trasladaría a Ponteceso y posteriormente a Corme.
Decaído el auge de la pesca de ballena, la peligrosa ensenada (o "ribera" como aún se conoce en la actualidad el puerto malpicano) pasó a ser cala de arriesgados marineros en lanchas de vela que pescaban con artes tradicionales hoy desaparecidas como el "mediomundo". Posteriormente, el sector pesquero cobró un nuevo impulso tras la aparición de las fábricas de conserva y saladura; ahora las tarrafas se lanzaban al mar para capturar la sardina que llenaría los tabales de los Abella o Modesto Ordóñez. En tiempos de escasez, se buscaban mejores caladeros en la ría de Muros.
En la actualidad, Malpica cuenta con una numerosa flota de embarcaciones del cerco y de pesca del día que esperan cada faena en un puerto dotado con inmejorables infraestructuras (fábrica de hielo, lonja nueva, nave de rederas, gran puerto de descarga, dársena de abrigo para pequeñas embarcaciones).
Propio del puerto malpicano, y oficio singular en toda Galicia, es la presencia de los boteros, o taxistas del mar, que cada tarde transportan en sus botes a los marineros desde el muro hasta las embarcaciones pesqueras.
Monumentos
Torres de Mens.
Iglesia de Santiago en Mens, románica del siglo XII.
Pedra da serpe.
Ermita de San Adrián, situada en el cabo de San Adrián. Anualmente, en junio, se efectúa una romería desde la iglesia del pueblo a la ermita, aproximadamente a cuatro kilómetros. En las proximidades existe una fuente que se dice tiene propiedades curativas en enfermedades de la piel.
Dolmen de Piedra de la Arca.
La Casa del Pescador, que contiene diversas pinturas murales del artista gallego Urbano Lugrís, de inspiración profundamente marinera (flora y fauna marina, leyendas del mar, rosa de los vientos).
El puerto de Malpica ofrece otros atractivos para el visitante. Entre los pescadores de caña a las luras, es fácil sentirse nostálgico mientras marineros izan artes de pesca o mientras tarrafas y motoras se acercan al puerto abarrotadas con la pesca de la noche o del día.
Sentadas en el suelo, las atadoras cosen con arte las redes que se rompieron en el fondo del mar. En la lonja, a primera hora de la tarde, el grito de la subasta espera una compradora ("pesca" en la jerga local) la voz de "mío" para que se haga el silencio y realizar la compra. Las Fiestas del Mar, en agosto, funden agua, fuego y gente en la alegría.
Después de saborear cualquiera de los exquisitos platos que ofrecen los restaurantes locales (caldeiradas de pescado, pulpo, marisco), o entre comidas, Malpica invita a echar una caminata por sus calles empinadas, en busca del calor de la conversación alrededor de una hoguera y probar las sardinas asadas.
Tierra adentro, gentes de taberna con la compañía de la taza hablan de abundantes caladeros y duras faenas en el mar. Las plazas de la villa marcan la vida de Malpica marinera.
La Plaza de Anselmo Villar Amigo, recuerda la figura singular de este bienhechor emigrado a la ciudad de Buenos Aires. La Plaza de Santa Lucía fue tiempo atrás espacio de hostales como El Tesoro Escondido donde se hospedó el escritor sevillano Pepe Más, y ojo de los Bajos de Baldaio en días de temporal. Fiestas
Además de las fiestas parroquiales, tienen fama Corpus Christi y las Fiestas del Mar de Malpica, y la celebración de Santa Filomena en Buño y San Blas en Villanueva.
San Adrián
La fiesta de San Adrián se celebra el primer domingo después del 16 de junio. El festival comienza con la salida del Santo Adrián en procesión desde la iglesia parroquial de San Xulián de Malpica, donde durante todo el año según la tradición, San Adrián cura verrugas. El rito es, después de oír misa, lávese las manos y secarlas en la fuente en una tela que se deja secar al lado de la fuente. La tradición también habla de la curación de otras enfermedades del cuerpo humano y de los animales, después de la misa y la donación correspondiente de una figura de cera que representa la parte enferma del cuerpo. Hay puestos de exvotos en el camino a la capilla, y las cifras se quedan dentro de la capilla.
Corpus
El Corpus se celebra desde hace más de doscientos años. Tradicionalmente se celebra el jueves y el martes antes de que los agricultores se acercaron a las afueras del centro de la ciudad con sus corderos y ovejas, que eran los mercados de malpicáns a la fiesta. Actualmente se celebra el viernes siguiente para cumplir con el calendario de trabajo. Es día de fiesta local. El festival consiste en alfombras de flores, procesión por la mañana, orquestas y atracciones.
Fiesta del Mar
El Festival del Mar, que se celebró a finales de agosto, es el homenaje de la gente de mar a su patrona, la Virgen del Carmen, en honor de los que murieron en el mar y todos los marineros. Se dedica una procesión de barcos de pesca decorados con flores que llevan la imagen de la Virgen a las Islas Sisargas, acompañada de varios barcos llenos de gente. Es tradicional lanzar flores al mar como ofrenda a los muertos. Cada año cuenta con una Virgen diferente en un barco y otro barco dará seguimiento con la banda. La gente tira por la borda a veces su ropa, al terminar la procesión.